
El Pozole, un festín de maíz que celebra la unión
El pozole es un guiso ancestral de México cuyo ingrediente estrella es el maíz cacahuazintle. Los pueblos prehispánicos lo preparaban en rituales importantes como símbolo de comunidad y fertilidad. Su nombre proviene del náhuatl “pozolli”, que significa espuma, por la apariencia del maíz al cocerse.
Existen tres variedades principales: el pozole blanco, típico de Guerrero; el rojo, común en Jalisco; y el verde, característico de Michoacán. Cada versión utiliza chiles y hierbas distintas, pero todas comparten esa riqueza de sabor que lo convierte en un plato reconfortante y festivo.
El pozole no está completo sin su guarnición: rábanos, cebolla, lechuga o repollo, orégano, chile en polvo, limón y tostadas con crema. Este ritual de añadir ingredientes al gusto convierte cada plato en una experiencia personalizada y llena de tradición.
En México, el pozole es protagonista en celebraciones patrias y reuniones familiares, especialmente en las fiestas del 15 de septiembre. Más que un platillo, es una tradición compartida que refuerza la identidad cultural y la calidez de la mesa mexicana.